¿qué puedo contar hoy?

Podría contar de mis vecinos, que me cagan, podría decir que mis manos están frias, que me levanté a las 5:30 y trabajé hoy hasta hartarme, que otra vez mi novio se embriagó, que además me puse triste pero no lloré, que también me rei mucho en la chamba y hasta la panza me dolió, que comí pastel de zanahoria, que estuve mirando La Familia Robinson en casa de mi abuela tooda la tarde y que por eso otra vez olvidé probarme los pantalones para que mi abuela me ayude a ajustarlos porque bajé de peso (eeee!), que mi prima vuelve a maquillarse después de un buen rato y se ve tan bien, que a mi sobrino POR FIN se le cayó aquel diente que tuvo flojo tanto tiempo, que limpié el arenero después de meses de no limpiarlo (porque no me corresponde, no por sucia...), que sólo he tomado un par de vasos de agua, que recibí una invitación de reencuentro con mis ex-compañeras de secundaria (oh, por Dios), que ya atrasé los relojes (ahora si es para atrás, ¿no?) y ya.

estaba muy inspirada, muy inspirada
y ahora ya no pienso nada.

creo que no es ético:

· matar
· robar
· mentir (así: de una manera fea, jaja)
· prometer y no cumplir
· hablar "de dientes para afuera" (o sea sin sentir lo que se dice)
· ser infiel (mmm...)
· ser egoista
· contaminar
· ser racista
· ser irrespetuoso
· ser intolerante con los demás
· hablar sin escuchar

y bueno, seguramente algo se me estará pasando.

aunque suene cursi... (del 17 de octubre)

Me siento orgullosa de ser quien soy, de ser como soy, de haber recibido la educación que recibí. Estoy orgullosa de mis valores aunque de alguna manera eso me "separe" de otras personas.
Hoy me siento feliz, creo. Tengo curiosidad de conocer muchas historias, de contar las mias, de añadir, aumentar, de inventar.
Fui a ver CEGUERA y me siento muy avergonzada de no haber leido a José Saramago aún (si: jitomates aguados a mi...) Terminó pasándome lo que tantas veces me ocurre, miré la película antes de leer el libro en que está inspirada o basada. No me gusta que me pase eso pero ya no puedo volver a proponerme hacerlo al revés porque seguro me sentiré culpable si no lo cumplo.

Y de feliz pasé a agobiada.