06 septiembre 2008

(del 2 de septiembre)

Hoy no confío en nadie. Se han empeñado en convertirnos en animales temerosos y creo que lo lograron ya. No se si para algunos es un arma poderosa o una estrategia defensiva (¡?) parecer peligrosos, sospechosos. A veces eso funciona conmigo, así como me ha pasado hoy al menos dos veces y ayer una.
¿Que está pasando en este puto país, en esta puta ciudad? ¿quien quiere que esto pase así?
Podríamos especular y culpar a lo güey: que si el narco, los gringos o el mismísimo demonio. Yo no creo que el diablo, así como lo conozco, sea tan malo.

No hay comentarios.: